quinchos cerrados sencillos

quinchos cerrados sencillos

¿Qué son exactamente los quinchos cerrados sencillos?

No hace falta imaginar una estructura elaborada con paredes de piedra y techos de teja. Los quinchos cerrados sencillos son, ante todo, soluciones inteligentes y accesibles. Usualmente consisten en una estructura básica techada —de madera, aluminio o policarbonato— con cerramientos laterales de vidrio, PVC o lona transparente. La clave es que puedan usarse tanto en verano como en invierno.

Esta sencillez no sacrifica utilidad. Al contrario, mejora el uso del patio o jardín sin lidiar con permisos de obra o semanas de construcción. Se montan fácil, lucen bien, y cumplen su propósito: un punto de encuentro cómodo y protegido.

Ventajas que suman valor

Invertir en un quincho cerrado, incluso en versión simple, puede cambiar por completo cómo se disfruta el hogar. Estas son algunas ventajas prácticas:

Uso durante todo el año: Ya no dependés del clima para disfrutar del asado del domingo. Mantenimiento bajo: Los materiales seleccionados suelen ser resistentes a la intemperie. Estética flexible: Desde estructuras rústicas hasta diseños más modernos, se adaptan al estilo de tu casa. Aumento de valor de la propiedad: Aunque sean sencillos, suman metros “habitables” visualmente.

No necesitas tener un parque. Incluso patios de tamaño medio o terrazas pueden albergar un pequeño quincho cerrado con parrilla, barra o simplemente una buena mesa con sillas.

Estructura básica y materiales recomendados

El diseño más común incluye una estructura techada con cerramientos laterales móviles o fijos. Estas son algunas opciones de materiales y por qué convienen:

Estructura: Hierro galvanizado o madera tratada. Son durables y relativamente livianas. Techo: Policarbonato (deja pasar luz natural), chapas con aislación o incluso toldos retractables. Laterales: Vidrio templado si se busca una opción más elegante y duradera; toldos plásticos transparentes para algo económico y funcional.

También hay soluciones modulares prefabricadas que reducen tiempo de armado y se adaptan a distintos espacios.

Diseños populares de quinchos cerrados sencillos

Aunque el concepto es simple, algunos elementos de diseño pueden marcar la diferencia. Aquí algunos modelos populares:

Estilo galería extendida

Ideal para patios largos. Usás uno de los muros existentes de la casa y extendés un techo con cerramiento lateral. Entre lo útil y lo estético, sin ocupar demasiado espacio extra.

Cierre completo tipo cabaña

Un techo a dos aguas y muros livianos de madera o policarbonato, creando un pequeño refugio cerrado. Perfecto para quienes priorizan confort térmico y algo más “indoor”.

Quincho tipo deck techado

Una base de madera elevada, un techo liviano y cerramientos tipo cortinas roller plásticas. Práctico, bonito y desmontable si es necesario.

Cualquiera de estos diseños puede ser personalizado con iluminación led, estufas a gas o eléctricas, mobiliario rústico o moderno y, claro, la parrilla.

Consejos para construir tu propio quincho cerrado sencillo

  1. Medí bien el espacio antes de comprar materiales. Aunque sea sencillo, tiene que ser funcional y seguro.
  2. Priorizá la ventilación: si vas a usarlo para cocinar, necesitás circulación de aire.
  3. Pensá en el sol: orientá correctamente el techo para aprovechar luz natural sin encandilar.
  4. Chequeá normativas locales. Algunas ciudades tienen restricciones sobre construcciones exteriores.

Y si lo mandás a hacer con un profesional, tené definido qué querés para evitar sobrecostos innecesarios. El “sencillo” empieza por planificar bien.

Presupuesto estimado para un quincho cerrado simple

Los precios dependen del tamaño, materiales, y si el armado lo hacés vos o contratás a alguien. A modo de guía:

Quincho básico con lona y madera: desde $300.000 ARS Estructura metálica con cerramientos móviles: $500.000 a $800.000 ARS Quincho prefabricado tipo módulo cerrado: desde $1.000.000 ARS

Conviene comparar opciones con distintos proveedores locales y no olvidar los costos de mano de obra, electricidad o instalaciones extra.

Mantenimiento y durabilidad

Una de las grandes ventajas de estos cerramientos es el bajo mantenimiento requerido:

Limpiá regularmente los cerramientos transparentes para prolongar su vida útil. Revisá anualmente fijaciones, estructuras y aislaciones del techo. Aplicá protectores a la madera cada dos años si está al exterior.

Bien cuidados, pueden durar entre 8 y 15 años, dependiendo del clima local y el tipo de materiales usados.

En resumen, los quinchos cerrados sencillos combinan practicidad, bajo costo y una mejora instantánea en la calidad de vida. No hace falta construir en grande para disfrutar en serio. Con un poco de planificación y buenas elecciones, podés crear un refugio funcional que se adapta a tu casa y a tu estilo.

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